Diez ventajas de ser introvertido y una gran desventaja
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¿Cuál es la diferencia entre ser introvertido y ser tímido?
Aunque en el imaginario popular la introversión se identifica con la timidez, no es lo mismo. La introversión es una característica de personalidad que no implica miedo ante las situaciones sociales. La persona con personalidad introvertida simplemente necesita la soledad y no rehuye el contacto social por temor sino porque no le apetece estar rodeada de gente, porque es reservada y prefiere mantener sus emociones en privado.
Al contrario, la persona excesivamente tímida normalmente desea mantener ese contacto social, pero su miedo se lo impide. Cuando se instaura la timidez, la persona experimenta una sensación de incomodidad y nerviosismo, sobre todo cuando está frente a desconocidos o debe desenvolverse en grandes grupos. Como resultado, sufre por ello, hasta el punto que puede llegar a desarrollar una fobia social.
Básicamente, la principal diferencia entre la introversión y la timidez se refiere a la motivación para compartir tiempo con los demás. La persona tímida desea estar en compañía, pero se siente inhibida delante de los demás, mientras que la persona introvertida no experimenta ese malestar sino que busca la soledad por voluntad propia.
La introversión extrema
La introversión-extroversión es un continuo dónde todos nos situamos más arriba o más abajo, es en los extremos dónde podemos encontrarnos con una situación patológica.
Es el caso del trastorno de personalidad esquizoide, donde hay un rechazo a las relaciones sociales, no por miedo, sino por total falta de interés. En este trastorno estaríamos hablando de una introversión extrema.
Características de las personas introvertidas
Descubre si eres más introvertido que extrovertido. Dependiendo de en qué medida te sientas identificado con estas características te situarás más cerca de la introversión.
Las personas introvertidas:
- Prefieren mantener charlas sobre temas más trascendentales, las conversaciones sobre asuntos banales les suelen molestar y les resultan aburridas, por lo que prefieren no participar en ellas. Por eso, pueden parecer distantes o cohibidos, cuando en realidad lo que sucede es que el tema no atrae su atención.
- Disfrutan de tener tiempo para sí mismos. Es por ello que cuando las personas introvertidas tienen la oportunidad de tomar un descanso, lo aprovechan para leer, ver una buena película o escuchar música. Estas personas disfrutan de la soledad y el silencio es importante para su bienestar emocional. De hecho, en esos momentos de soledad es cuando se les ocurren las mejores ideas y pueden sacar lo mejor de sí mismos.
- No se sienten cómodos sobresaliendo en los grupos, aunque pueden ser buenos líderes si se les brinda la ocasión. No obstante, como no sienten la necesidad de ser el centro de atención, prefieren guardarse sus opiniones y compartirlas en entornos más íntimos, donde se sienten más valorados y mejor escuchados.
- Suelen evitar el contacto social con desconocidos, por lo que en los transportes públicos prefieren ocupar los asientos del fondo, donde hay menos probabilidades de ser molestados. También suelen usar auriculares como una estrategia para protegerse y aislarse del mundo.
- No expresan con facilidad sus emociones y pensamientos. Cuando tienen un problema, a menos que tengan mucha confianza con la persona, prefieren guardarse sus preocupaciones. Los introvertidos prefieren salir de las dificultades usando sus propias estrategias.
- Son muy detallistas, tienen una habilidad especial para notar detalles que pasan desapercibidos para el resto de las personas. También son capaces de captar las situaciones en su complejidad, analizando el panorama completo.
- Les gusta escribir porque de esta manera pueden expresar sus emociones sin que medie un contacto directo. Por eso pueden llevar un diario o incluso lanzarse a la aventura de ser escritores. También es usual que prefieran responder a través de un correo o un mensaje de texto, en vez de aceptar una llamada telefónica.
- Pueden sentirse solos, aunque estén rodeados de gente. De hecho, las personas introvertidas no suelen acudir a las fiestas y los eventos sociales para conocer a más gente sino tan solo para disfrutar de la compañía de sus amigos.
¿Cómo es el cerebro de las personas introvertidas?
Las personas introvertidas no son, necesariamente, más inteligentes que los extrovertidos, al menos en lo que a cociente intelectual se refiere. Sin embargo, las investigaciones indican que son capaces de procesar una mayor cantidad de información, siempre y cuando estén en un entorno tranquilo.
De hecho, se ha descubierto que la actividad eléctrica en el cerebro de las personas introvertidas es mayor de la que se aprecia en los extrovertidos, lo que indica una mayor activación cortical, tanto cuando solucionan problemas cognitivos como en estado de reposo.
Los investigadores piensan que, debido al aumento de la actividad cerebral y la reactividad, los introvertidos se ven obligados a limitar la cantidad de estímulos que provienen del medio, en aras de mantener un nivel óptimo de excitación. Los extrovertidos, al contrario, necesitarían continuamente la estimulación externa para obtener ese mismo grado de activación cerebral.
Por otra parte, estudios de neuroimagen en los que se ha medido el flujo sanguíneo cerebral han revelado que en los introvertidos se aprecia una activación mayor en la corteza frontal. Esta área es la principal encargada del recuerdo, la planificación, la toma de decisiones y la solución de problemas que requieran concentración.
También se ha apreciado un aumento del flujo sanguíneo en el área de Broca, una región asociada con el habla, lo cual puede deberse al diálogo interior que estas personas mantienen constantemente consigo mismas.
Una gran desventaja de ser introvertido
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Ese diálogo interno también puede dar lugar a un pensamiento rumiante de los problemas. Un buen caldo de cultivo para trastornos como la depresión, la ansiedad o el trastorno obsesivo-compulsivo, problemas que son más comunes en las personas introvertidas. De hecho, también se ha apreciado que estas personas son más auto-críticas, lo cual puede llevarles a exigirse demasiado y aumentar la presión.
Diez ventajas de ser introvertido
Las personas introvertidas:
- Escuchan con atención. Las personas introvertidas no suelen tener la imperiosa necesidad de hablar que experimentan los extrovertidos, en muchas ocasiones prefieren escuchar. Esto los convierte en buenos amigos ya que escuchan con paciencia y buscan soluciones eficaces para los problemas.
- Ven detalles que pasan desapercibidos para los demás. Las personas introvertidas ven el mundo de manera diferente, lo cual les permite apreciar los problemas y las situaciones desde diferentes ángulos y matices. Esto los convierte en consejeros muy valiosos ya que no son impulsivos y piensan tres veces antes de hablar.
- Tienen un gran autoconocimiento. Las personas introvertidas tienen una gran capacidad de introspección. Les gusta pasar tiempo en soledad y bucear en su interior, por lo que suelen desarrollar un conocimiento muy profundo sobre sí mismas. Esto les permite conocer mejor sus potencialidades y saber dónde están sus límites.
- Desarrollan grandes pasiones. La extroversión y la impulsividad a menudo van de la mano, por lo que estas personas a menudo dejan los proyectos a medias. Sin embargo, los introvertidos suelen desarrollar grandes pasiones y son capaces de invertir en ellas una enorme cantidad de tiempo y energía. Son muy perseverantes, por lo que a menudo se convierten en expertos sobre un tema reconocidos socialmente.
- Tienen la capacidad de auto-motivarse. La persona introvertida es capaz de cambiar las baterías ella sola y llenarse de energía. Solo necesita un poco de tiempo para sí mismo, pasar unas horas en soledad. Así reencuentra la motivación y la energía que necesita para seguir adelante. Esto se debe a que no necesitan encontrar las recompensas en su entorno, las hallan dentro de sí.
- Son más independientes. Aunque todos necesitamos redes de apoyo social, la persona introvertida disfruta haciendo cosas sola, no necesita un público. La introversión le permite trabajar de manera independiente y disfrutar de la vida en soledad. Esto les permite ser más independientes y, por ende, tener más libertad.
- Pueden mantener la calma en medio de la tormenta. Ante fechas límites o conflictos interpersonales, la persona introvertida logra mantenerse más serena. El profundo conocimiento que tiene de sí mismo y su visión holística sobre las situaciones le permite mantener un mayor autocontrol y funcionar mejor bajo estrés.
- Se concentran con mayor facilidad. Las personas introvertidas suelen tener un mundo interior muy rico, en el que se refugian cuando pierden el interés por las conversaciones. Como no están orientadas principalmente hacia el exterior, los estímulos les distraen menos y les resulta más fácil concentrarse en las tareas.
- Son excelentes líderes. En contra de la creencia popular, las personas introvertidas son excelentes líderes que saben sacar a la luz lo mejor de sus subordinados. De hecho, suelen desarrollar un estilo de dirección muy participativo en el que escuchan las ideas y problemas de los empleados, usando esa información para mejorar el clima de trabajo y la productividad.
- Son muy sensibles. Muchos piensan que los introvertidos son fríos y distantes pero en realidad son sensibles y empáticos. Lo que sucede es que no buscan rodearse de mucha gente, sino cultivar buenos amigos. No buscan la cantidad,. sino la calidad de las relaciones. Además, siempre se mantienen atentos a los detalles y están dispuestos a ayudar a los otros.
Sobre la Autora
Rosario Linares es psicóloga y psicoterapeuta. Fue una de las pioneras en España en integrar en la psicoterapia el trabajo terapéutico, tanto con la parte más racional de nuestro cerebro como con la parte más emocional. Para ello utiliza una metodología innovadora, con herramientas como la hipnosis, EMDR (Eyes Movement Desensitization and Reprocessing), PNL (Programación Neurolin- güística), EFT (Emotional Freedom Techniques), el mindfulness y el coaching.
Actualmente dirige el gabinete de psicología "El Prado Psicólogos", centro psicológico de referen- cia en Madrid en psicoterapia breve y terapias de tercera generación, dónde se trabaja desde una metodología integrativa.
Ha publicado los libros "Resiliencia o la adversidad como oportunidad" y "Duelo y resiliencia. Guía para la reconstrucción emocional", este último junto a su compañera Ana María Egido.
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