


Cómo superar la vergüenza
¿Cómo superar la vergüenza cuando esta nos limita? No es tarea fácil, pero con constancia y atreviéndonos a salir de nuestra zona de confort podemos aprender a perder la vergüenza poco a poco. La vergüenza es una sensación que nos hace sentir mal, casi siempre por algo que hemos hecho, dicho o pensado y que consideramos impropio. Por una parte, implica un juicio sobre nosotros mismos pero, por otra parte, está profundamente vinculada a los demás, a la valoración que los otros harán de nuestro comportamiento. Por eso, la vergüenza siempre implica, de una forma u otra, el miedo al juicio negativo de los otros. De cierta forma, es como si perdiésemos una parte importante de nuestra identidad, de la imagen que proyectamos al mundo.
Cómo dejar de vivir con miedo
Vivir sin miedo no es posible, el miedo es necesario, pero superar el miedo que nos impide avanzar, el que nos bloquea, es una de las mejores formas de crecer como personas y de alcanzar una vida más plena.
Enfermedades emocionales
¿Hay enfermedades emocionales? Emociones y enfermedades van muchas veces de la mano, aunque durante siglos la medicina tradicional negó la influencia de los estados emocionales en las enfermedades físicas, en las últimas décadas las investigaciones han desvelado que nuestro estado de ánimo puede desencadenar algunas patologías, empeorar su curso o, al contrario, facilitar la recuperación.Ahora investigadores finlandeses han realizado un mapa corporal que muestra con claridad en qué zonas inciden las emociones.
Secuestro emocional: Cuándo no podemos evitar perder los nervios
¿En ocasiones no puedes evitar perder los nervios y arremeter contra las personas que se encuentran a tu alrededor para después arrepentirte? ¿A veces pierdes el control y sientes unas ganas irresistibles de escapar? Si en alguna ocasión has vivido esta experiencia, lo más probable es que hayas sido víctima de un “secuestro emocional”, una situación en la cual la amígdala declara un estado de emergencia y toma el control del cerebro.
Estrés y cáncer
“Mens sana in corpore sano”, así rezaba un antiguo proverbio que la medicina olvidó durante años. Sin embargo, ahora el papel de las emociones en el ámbito de la salud y la enfermedad ha vuelto a cobrar protagonismo de la mano de diferentes estudios que nos demuestran, por un lado, la relación que hay entre estrés, depresión y cáncer y por otro, cuán importante es el apoyo psicológico para recuperarse de esta enfermedad.
Cómo controlar la ansiedad ante un Ataque de Pánico
Un ataque de pánico es algo que no se puede olvidar, y que suele marcar un antes y un después en la vida de la persona que lo sufre por primera vez. En este artículo quiero enseñarte cómo controlar la ansiedad cuando empiezas a sentir los primeros síntomas de un ataque de ansiedad.
Aprende a ser Asertivo y comunícate con eficacia
¿Qué significa ser asertivo? Para explicarlo veamos un ejemplo: Imagina por un segundo que estás en un restaurante y te sirven un plato que no te agrada. Nos ha pasado a todos, pides la carne poco hecha pero la que llega a tu mesa está casi quemada. ¿Qué haces? En este punto tienes tres opciones: 1. te mantienes callado y la comes aunque te sientas disgustado 2. provocas un gran revuelo y afirmas que jamás volverás a poner pie en ese restaurante o 3. llamas discretamente al camarero y le pides que te cambie el plato. En realidad, el comportamiento que adoptes en esta situación no es banal puesto que te puede dar muchas pistas sobre el estilo comunicativo que usas en tu día a día para relacionarte con las personas. Puedes usar un estilo pasivo (cuando te mantienes callado y reprimes tus emociones e ideas), puedes apostar por el estilo agresivo (cuando intentas que tus opiniones y deseos prevalezcan sobre los demás a cualquier costo) o puedes adoptar un estilo asertivo (cuando haces valer tus derechos en el respeto a los demás).
El sentimiento de soledad
Todo el mundo ha experimentado en algún momento el sentimiento de soledad. El ser humano es social por naturaleza, lo cual significa que necesita el contacto y la relación con otras personas y suele huir de la soledad no deseada. A pesar de ser autónomo e independiente, las relaciones interpersonales aportan seguridad y bienestar, dos aspectos esenciales para mantener el equilibrio psicológico. De hecho, cuando por una razón u otra uno comienza a aislarse, la soledad puede terminar teniendo consecuencias físicas, psíquicas y emocionales.
Saber perdonar: un proceso liberador
Saber perdonar no es fácil. ¿Cómo perdonar si nos han hecho tanto daño? ¿Se puede aprender a perdonar? Martin Luther King afirmó que “el que es incapaz de perdonar, es incapaz de amar”. De hecho, el perdón es uno de los actos más admirables del ser humano porque implica que, a pesar de los daños que podamos haber sufrido, hemos sabido dejar atrás el pasado y podemos mirar al futuro asumiendo una nueva perspectiva. Perdonar no solo implica una liberación para quien cometió el error, sino que también libera a la persona que perdona. Perdonar no es algo que hacemos por el otro en la mayoría de las ocasiones, sino algo que hacemos por nosotros mismos. Muchas personas se resisten a perdonar pues creen que eso significa volver a exponerse al daño o que el otro debe pagar por lo que ha hecho y no se merece que lo perdonen, pero perdonar es en realidad un acto egoísta, un favor que nos hacemos a nosotros mismos, y la capacidad de perdonar es un signo de inteligencia emocional. Decía Buda que "empeñarse en la ira es como aferrarse a un carbón ardiente para arrojárselo a otro: quien se quema eres tú" Perdonar no implica aceptar lo que nos hizo la otra persona o que esa persona no tenga que asumir las consecuencias de sus actos, significa liberarnos de las emociones que nos bloquean y nos impiden avanzar. Cuando le preguntaron a Nelson Mandela cómo pudo perdonar respondió: “cuando atravesé la puerta me di cuenta de que si continuaba odiando seguiría en la cárcel”.
Qué es la psicología positiva: la práctica de la felicidad
La psicología positiva está de moda. Aunque encontrar la felicidad ha sido uno de los propósitos cardinales de las personas a lo largo del tiempo, en los últimos años se ha desarrollado una rama de la Psicología dedicada casi exclusivamente a estudiar la felicidad humana. Todos queremos ser felices, y para lograrlo trazamos distintas estrategias, nos planteamos diferentes metas, adquirimos bienes materiales, concentramos toda nuestra energía en un proyecto… En fin, los caminos son diferentes pero el propósito es siempre el mismo: ser feliz.. La psicología positiva trata de estudiar cuales de esos caminos son realmente efectivos, pues todos hemos descubierto alguna vez que aquello que pensábamos que nos iba a hacer felices no lo ha hecho, por lo que el estudio sistemático de qué nos hace felices y qué no, puede ayudarnos a aplicar estrategias prácticas en nuestra vida y poner el acento en lo que realmente es importante a la hora de conseguir ese ansiado objetivo: la felicidad.